En el día de hoy, un tribunal de Wolomin (Varsovia) condenó a siete años de prisión a Wojciech Gil por abusar sexualmente de dos menores en Polonia y de seis en República Dominicana, a los que, además, tendrá que abonar una indemnización económica de 155.000 zloty, moneda de curso legal en ese país europeo, el equivalente a 40,000 euros.
Esos recursos serían repartidos entre todas las familias afectadas, de acuerdo a la procuradora fiscal interina de este Distrito Judicial, la magistrada Aura Luz García.
"El hijo mío sigue apagado, todavía estamos trabajando con él para ver qué puede pasar", señaló Ramón Peralta, padre de uno de los seis menores abusados sexualmente. Agregó que "eso es muy poco dinero, nosotros vamos a apelar esa condena".
También, el padre Alberto, como es conocido, no podrá trabajar con jóvenes durante 15 años.
"A través de los elementos de pruebas que el Ministerio Público recabó en el periodo de investigación fuera tramitada, a través de colaboración a la fiscalía de Varsovia, por lo que en el día de hoy recibimos la noticia de que al imputado Alberto Gil fue condenado a cumplir la condena de siete años de presión", señaló la fiscal interina.
Dijo que la sanción establecida en esa localidad corresponde a una pena máxima de 15 años, pero dado a que Wojciech admitió su culpabilidad, le redujeron la mitad de la condena.
"Aunque no era lo que esperábamos, pero ya tenemos que estar de acuerdo", indicó Ramón Fernández, padre de otro de los niños abusados.
Se recuerda que las investigaciones del hecho fueron iniciadas en noviembre del 2013, luego de que la Fiscalía de Santiago tuviera conocimiento de que el padre Gil abusaba sexualmente de menores, cuyos abusos eran grabados en video. Asimismo al cura se le acusa de promover la pornografía infantil.
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