El gobierno del presidente Medina estuvo a punto de votar en favor del Pacto Mundial para una Migración Ordenda y Regular, al cual se oponían diversos sectores políticos, pero un estudio pormenorizado del tema hecho por el Banco Central pudo evitar el voto junto a la mayoría de la ONU.
La parte dominicana tenía el consejo de algunos embajadores en el exterior de que era prudente votar con la mayoría de las naciones que habían estudiado y consensuado la declaración que tuvo aprobación previa en Marruecos y definitiva en la Asamblea General.
Otra cosa fue que en vísperas de la reunión de Marruecos y ante la insistencia de algunos periodistas sobre cómo sería el voto dominicano, una vicecanciller hizo un comentario que algunos interpretaron como que RD votaría “SÍ”.
Votar con la mayoría de los países ha sido la tradición dominicana y en el presente caso, estaba de por medio la reciente acogida por el organismo mundial de República Dominicana como miembro no permanente del Consejo de Seguridad desde enero 2019.
Por otro lado estaban las presiones de los Estados Unidos que votarían “NO” como en efecto hicieron junto a Polonia, Hungría, Israel y la República Checa, en tanto que 152 países votaron a favor y hubo doce abstenciones entre las cuales se contó el sufragio dominicano.
Quizá el presidente Medina tomó en cuenta diversos factores geopolíticos entre los cuales el más notable es la presión que ha venido ejerciendo los Estados Unidos en favor de su causa con el caso de Venezuela y otros países de la región.
Con un presidente Donald Trump impredecible para todos los fines, que insultó llamando “países letrinas” a África, El Salvador y Haití, la parte dominicana habría aplicado el dicho muy conocido de que “cuando veas la barba de tu vecino arder, pon la tuya en remojo”.
A la hora de repartir insultos y desconsideraciones el presidente Trump no se detiene ante nada, por ello anunció el jueves vía Twitter que su ministro de Defensa.
Jim Mattis dejaba el cargo. Mattis expresó en una carta su desacuerdo con el Presidente en el manejo militar.
El rifafarrafe ocurrió a pocas horas de que el mandatario dispusiera el retiro de todas las fuerzas armadas de Syria, bajo el supuesto de que el grupo Isis ya ha sido desmantelado, y un retiro parcial de Afganistán, lo que causó revuelo en Washington, D. C.
Informe del BC
El minucioso informe del Banco Central sobre el tema del Pacto Migratorio, escrito por la economista Ellen Pérez Ducy, con la supervisión del gobernador Héctor Valdez Albizu señala los pro y contras del acuerdo, como evitar el tráfico y explotación de personas.
Sin embargo dice que el Pacto “incluía disposiciones que solapaban legislaciones laborales ya vigentes y sugería un listado de responsabilidades para los estados receptores sin contemplar las limitaciones de la situación laboral local ni los costes financieros y económicos nacionales por asumir lo que es, en efecto, inmigración ilegal”.
El informe cita en sus consideraciones para rechazar que la RD vote en su favor, la utilidad que tendría un documento con respecto a migrantes cuando ya existen leyes nacionales, regulaciones y acuerdos internacionales, por lo que el pacto representaría una duplicación.
“El acuerdo insinúa un marco legal supranacional para asuntos laborales que contraría las realidades básicas económicas al proponer la inserción laboral de los migrantes sin tomar en cuenta la situación doméstica de empleo más que como mención, dificultando la implementación de un ideario tal”, afirma.
Se indica también que aunque el texto original de la ONU señala que no es vinculante para los países, dice que “lo que se visualiza a futuro es la tipificación de obligaciones para los países receptores con consecuencias por incumplimiento”, ya que el Pacto Global de Marrakech, base de la declaración de la Asamblea General, “habla de seguimiento para asegurar que este documento se traduzca en acciones concretas para el beneficio de millones de personas”.
Otra advertencia que hace el estudio del Banco Central sobre Pacto Global para una Migración Segura y la Declaración de Nueva York es que la ONU comprometa su reputación intentando imponer normas supranacionales o que contrarían o pudieran contrariar el interés nacional ciudadano, “pues se necesita preservar la autoridad de este organismo de resolución de diferencias entre estados para muchos otros temas de igual importancia”.
“El concepto de una tierra abierta, libre a asentamiento por demanda remite a los orígenes de la historia humana, época caracterizada por la violencia, donde, con la excepción de geografías, toda frontera se trazó por batalla”, asevera el informe.
Y a continuación expone su preocupación de que la ONU “pudiera estar induciendo a la humanidad a revivir el proceso de disputas por la definición de los espacios territoriales en vez de defender la paz y la prosperidad, su mandato central y crítico”.
Después de analizar una serie de otras consideraciones, el informe del Banco Central concluye con que desestimar la firma del pacto migratorio representa una medida oportuna, valiente y correcta “en razón de las implicaciones de naturaleza financiera, económica y social con cargo al gasto corriente público que habrían resultado de manera indefinida si se hubiese asumido el pacto como fue propuesto”.
Medina se acoraza
El presidente Medina al parecer está haciendo todo lo posible por acorazarse y evitar un choque con los Estados Unidos. Por ello es que se dice que contrató al lobbista de Washington, D. C., Briand Ballard, que al decir del canciller Vargas Maldonado es algo menor.
Ballard es un súper lobbista caro que hace un año tenía una oficina modesta en la capital y ahora despacha en un elegante piso con sillones tapizados en cuero en la zona comercial y de negocios. Tiene clientes en Europa, Africa y ahora en República Dominicana.
Medina ha manejado con pinzas los temas en los cuales pudiera haber rozamientos con los Estados Unidos. Por ello redujo de calor las relaciones con Venezuela, sin degradar la embajada en Caracas a un Encargado de Negocios como han hecho otros países del Sur.
El Presidente ha estado en todo lo que represente el capital norteamericano como la inauguración últimamente de hoteles de capital extranjero, dando “palazos” y dejándose notar como un amigo de Washington, para complacencia igual de los empresarios dominicanos.
El pago que se le ha hecho al lobbista Ballard fue minimizado por el ministro administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta. El noticiario ABC News el primero que citó la operación dijo que la misma involucró 1.2 millones de dólares como pago a Ballard.
Miguel Vargas Maldonado, el Canciller, minimizó la contratación de la oficina Ballard al decir que es una práctica común que tiene el Gobierno de contratar asesores. En el pasado gobiernos del Partido Revolucionario Dominicano, PRD, dirigidos por Antonio Guzmán y Salvador Jorge Blanco contrataron lobbistas norteamericanos para la mejoría de imagen y de relaciones con Estados Unidos.