viernes, 17 de octubre de 2014

Dicen tragedia donde murieron ocho personas se produjo por exceso de velocidad

HIGÜEY. La tragedia donde perdieron la vida unas ocho personas y más de 20 resultaron heridas al estrellarse un minibús cargado de empleados hoteleros con un camión varado, se habría producido por exceso de velocidad, lo que evidencia la irresponsabilidad del conductor del minibús y del camión, así como el desorden y el caos que impera en el tránsito en la zona turística Verón-Punta Cana.

Sobrevivientes de la tragedia narraron a Diario Libre que el conductor del minibús que transportaba los empleados del hotel Dreams, en Cabeza de Toro, viajaba con una música ensordecedora y a más de 100 kilómetros por hora por la estrecha vía.

El camión, que estaba estacionado sin señalización al final del tramo llamado como "La Recta de Leonel", es una volqueta rotulada con la ficha 118 del Sindicato de Camioneros y Furgoneros de la provincia La Altagracia (Chiprovoca), pero se desconoce quién es el conductor que lo dejó mal parado y quién es el propietario.

Minoru Matsunaga, director de la AMET en Verón-Punta Cana, no tenía, hasta entrar la noche de hoy, la cifra exacta de muertos y heridos.

Ayer se había confirmado ocho fallecidos, mientras que hoy se identificaron 19 heridos, algunos de los cuales fueron despachado para sus casas de los centros de salud.

El director de la clínica Doctor Cedano, de Higüey, doctor Virgilio Cedano, informó que en ese centro atendieron 20 accidentados, 12 de los cuales se encuentran ingresados, incluyendo a Rafael Ubiera, quien conducía el minibús que se estrelló contra la volqueta.

"De esta cantidad hay cuatro en observación por estar traumatizados, de los 12 que tenemos, tres fueron dados de alta esta mañana", indicó el galeno.

Explicó que desde las siete de la noche recibieron pacientes, tres con politraumatismo craneal, seis con fracturas óseas, cuatro con traumas a nivel abdominal y los demás con laceraciones de parte blandas.

Sostuvo que la misma noche del aparatoso accidente "operamos cuatro de los más críticos, dos de ellos con trauma cráneo cerebral y dos con cirugía de abdomen cerrados. Ayer fueron intervenidos cuatro con compromisos óseos".

Manolo Ramírez (Pupilo), del Sindicato de Transporte Turístico, asumió los gastos médicos de los sobrevivientes.

Testimonios

Belladina Peña, sobreviviente y nativa de San Juan de la Maguana, narró que no eran 60 los ocupantes del minibús, sino 36.

"Los asientos iban llenos. Había un camión en la oscuridad y el chofer trató de defenderse. Salvé mi vida porque venía detrás del conductor", acotó.

Peña fue atendida y despachada porque sólo recibió golpes leves en las manos y las piernas.

Juan Castillo, en cambio, defendió al chofer y dijo: "No venía a alta velocidad, ni el chofer estaba bebiendo".

"El conductor es viejo en la empresa y conduce siempre de manera moderada", agregó.

Pedro Javier Garabito, de 29 años, nativo del municipio de Haina, San Cristóbal, relató: "Vi la muerte sobre mí, eso fue feo, pero también vi a Dios que me abrazó y no permitió que me llevara".

"El vehículo iba rápido, pero si el obstáculo del camión cargado de arena no hubiese estado al final de la recta, nadie hubiese muerto", significó.

Las autoridades policiales en Verón confirmaron que en el minibús viajaban unas 36 personas, todos empleados del hotel Dreams.

Desde el momento del accidente, ocurrido pasada las 8:45 de la noche del jueves, muertos y heridos fueron distribuidos en clínicas y hospitales de la provincia La Altagracia y algunos enviados a La Romana y San Pedro de Macorís.

La tragedia ocurrió en el tramo conocido como "La Recta de Leonel Taveras", entre el minibús marca Hyundai, color azul, placa I027924, conducido por Rafael Ubiera y el camión volteo marca Mack, color negro, sin placa, que aún permanece en el lugar de la tragedia.

Nadie quiere decir en Higüey ni en Verón quién es el conductor del camión averiado en el kilometro 14, en la antigua carretera que va de la Otra Banda a Punta Cana.

Los muertos fueron Vladimir Rodríguez, Lis Torres (femenina), Salvador Terrero, Juan Alcántara Valdez, Pedro Vásquez, José Luis Ubiera y José Altagracia González. Otro de los cadáveres es de una mujer, la que llevaba una placa con el nombre de Dante.

Algunos de los cuerpos quedaron destrozados, con brazos y piernas amputadas, así como con rostros irreconocibles por los golpes recibidos.

Juan Alcántara Valdez fue velado en la Funeraria del Pueblo, en San Pedro de Macorís, donde acudieron centenares de personas.

Entre los heridos fueron identificados Joanna Rivera, Mario de los Santos Estrella, Rafael Ubiera, Domingo García, Luis A. Polanco, Miguel A. Caraballo, Pedro Javier Garabito García, Ernesto Santana Guzmán, Reynaldo Sosa y Julia Reyes, quienes permanecen internos.

También fueron curados y despachados con lesiones leves Yamaicol Rosario de los Santos, Frank Castillo, Antonio Alcántara Rivera, Maicol Ogando, Gabriel Gómez, Cristian Hernández, Juan Francisco Pérez, Deyanira Piña y Patricio Mota. 

El director de la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMET), general Pablo Arturo Pujols, ordenó una investigación para establecer las circunstancias en que se produjo el accidente de tránsito y apresar al conductor del camión estacionado.

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